null: nullpx
decoracion de tortas

Te enseñamos cómo hacer los frostings más deliciosos para tus muffins y tortas

Publicado 27 Sep 2017 – 03:30 PM EDT | Actualizado 23 Mar 2018 – 06:25 PM EDT
Comparte

El frosting es esa cobertura suave, cremosa y delicada que suelen tener los cupcakes y algunas tortas. A primera vista, puede parecer bastante difícil prepararlo uno mismo. Sin embargo, existen ciertos tips que podemos tener en cuenta para  fabricarlos en nuestro hogar con poco esfuerzo y excelentes resultados. Hoy te contamos 3, más una técnica básica para que te animes tú también a decorar tus preparaciones dulces con este tipo de coberturas magníficas.

1. Organización

Los frosting requieren un poco de organización de tu parte. Por ejemplo, resulta fundamental que retires la manteca (o el queso crema) de la heladera unas horas antes de empezar a cocinar para que quede a temperatura ambiente. Esta temperatura garantiza obtener una cobertura que pueda aplicarse con facilidad sobre cada muffin o sobre la torta. En caso contrario, la textura del frosting puede quedar un tanto densa y grumosa.

2. Implementos

El frosting tiene, a diferencia del glasé, una textura suave pero contundente. Lo ideal es que se mantenga firme sobre la superficie en la que lo coloquemos y que a su vez mantenga su cremosidad. Para lograrlo es necesario contar con una batidora. No tienes por qué comprar una de pie (aunque resultan útiles), una de mano irá perfecto para alcanzar este cometido. Lamentablemente, con un batidor que no sea eléctrico difícilmente podrás concretar un acabado perfecto.

3. El tamizado

Recuerda, además, tamizar tanto el azúcar impalpable como el cacao (en caso de que lo utilices) antes de incorporarlos a la preparación. Si te salteas este paso es probable que el frosting quede un tanto rígido.

Técnica básica

  1. Bate la manteca o el queso crema en un bol grande hasta que quede ligera y sedosa.
  2. De a poco, ve agregando el azúcar impalpable tamizado hasta formar una pasta espesa.
  3. Luego agrega la vainilla.
  4. Por último, añade la leche de a cucharadas mientras sigues batiendo unos minutos más. También podrías utilizar crema en vez de leche o una leche vegetal si quisieras hacer un frosting vegano. La textura ideal es voluminosa, consistente, sedosa y fácil de aplicar.

Otro tip que debes recordar es que no deberías refrigerar la cobertura, ya que se supone que posee la cantidad de azúcar necesaria como para que se mantenga en buen estado a temperatura ambiente. En caso de que no lo uses completamente, guárdalo en un recipiente hermético o en un bol tapado con film. Cuando vayas a utilizarlo nuevamente te convendrá volver a batirlo un poco antes de colocarlo sobre tus muffins o tortas. Esperamos que te sean de utilidad estos consejos y que consigas preparar frostings exquisitos en tu propio hogar.

Comparte
RELACIONADOS:ViX.